Exito. A pesar de la titubeante y cuestionada preparación en los días que van del Royal Rumble hasta la gran tarde, Wrestlemania 31 estuvo a la altura y nunca se encuadrará entre las flojas ediciones que se han visto recientemente (27 o 29). Todo apuntaba al fracaso absoluto, pero una vez más, WWE ha tenido la capacidad de sorprender a sus fans. A las 15h. del pasado domingo, el monumental Levi´s Stadium de Santa Clara acogía a 77.000 personas dispuestas a vivir una velada inolvidable. Para ir abriendo boca, la Fatal 4 Way por el título de parejas mientras el estadio, poco a poco, se iba calentando. Cesaro y Tyson Kidd retuvieron cinturones en una lucha rápida pero efectiva, llena de suplex, cuentas, finishers y acción fuera del ring. Con Los Matadores poniendo la nota latina, The Usos la polinesia y New Day la exótica, la lucha de apertura convenció y no fue un simple opening. Seguidamente, la segunda edición de la Batalla Real en memoria de Andre The Giant. Curtis Axel, ridículo, fue el primer eliminado a los pocos segundos a manos del resto de participantes. Zack Ryder, como siempre, cuando estaba a punto de tener su momento, quedó fuera eliminado por el ingenuo Bo Dallas, quien además se autoeliminó. El representante de NXT, el nipón Hideo Itami, lo estaba bordando hasta que se le ocurrió hincharle las narices a Big Show, que obviamente, no tuvo piedad. The Ascension sacaron a Mark Henry y cuando Ryback se desbocó, las cosas se empezaron a clarificar. Cesaro, actual poseedor del torneo, tuvo el honor de sacar a Kane, pero no pudo repetir la hazaña del año pasado y esta vez, Big Show sí lo eliminó. Así, solo quedaron el gigante y los Mizdow. Tal como el público llevaba requiriendo semanas atrás, Damien Sandow terminó por reventar y, ante el clamor de los fans, echó a Miz. Momentazo. Finalmente, Big Show elimina a Sandow, no sin apuros, y se lleva el trofeo.
Hasta aquí el kick-off. Son las 16h. y esto empieza de manera oficial. Y es con el ladder match por el cinturón Intercontinental. Aunque mil veces visto ya, esta modalidad de combate nunca defrauda. Fueron 13 minutos de escaleras pa´qui pa´ya entre Bad News Barret, que entró como campeón, Daniel Bryan, Stardust, R-Truth, Dolph Ziggler, Luke Harper y Dean Ambrose. Como era de preveer, Bryan se alzó con el título, derribando a Ziggler desde lo alto de la escalera en una lucha de cabezazos. Puede que sea el momento de volver a dignificar este campeonato. Ahora o nunca.
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| Ese Daniel... campeón!!! |
Seguimos. Seth Rollins y Randy Orton culminan feudo de una vez en single match. No tengo duda alguna, de que esta lucha, con el tiempo, será la pequeña joya escondida de esta edición. Hay quien considera que el RKO final de Orton, cazando al vuelo a Rollins, es el mejor que ha ejecutado en su carrera. No se si decir tanto, pero está claro que a todos nos levantó del asiento. Victoria para Randy pues... pero el momento de Rollins estaba por llegar. Más adelante se desvela. A continuación llegaba un (el) momento histórico de esta edición. Sting, por primera vez en su dilatada y legendaria carrera, se subía a un ring de la WWE. El conflictó que empezó el año pasado en Survivor Series con Triple H, desembocaba en este combate, que es desde ya un clásico. Y más que por la lucha en sí, por sus apariciones estelares. Eso sí, la entrada del Rey de Reyes al estilo terminator, me pareció de las peores que ha hecho. Mediada la lucha, entran unos viejos amigos del del mazo. A los compases de la música de DX, Road Dogg, Billy Gunn y X-Pac, interfieren atacando a Sting. Pero, obviamente, el tema se había ido por el cauce de la nostalgia y ojo, llegan NWO. Hulk Hogan, Kevin Nash y Razor Ramon / Scott Hall, igualan fuerzas en favor de Sting. ¿Ya está todo visto? Ni de coña. Sin saber de donde, Shawn Michaels entra y aplica la sweet music chin a Sting mientras ejecutaba el scorpion deathlock. Triple H se arrastra y la cuenta solo llega a 2, y a continuación todo el estadio grita: "this is awesome". Recuperados, sacan la armas. Pero el mazo de Triple H acaba hecho añicos con el bate de Sting. Sin embargo, cuando este lo tenía todo a favor, recibió un golpe en la cara con lo poco que quedaba del martillo y la pelea se acabó. Ya con los 8 hombres en el cuadrilátero, cara a cara 4 a 4, la sangre no llegó al río y Triple H tendió la mano a Sting, que se la dio, cerrando uno de los momentos que quedarán para siempre en el wrestling.
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| El cara a cara |
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| NWO entrando a la arena |
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| Respeto entre leyendas vivas |
En el pequeño descanso que siguió, Skylar Grey y Kid Ink interpretaron las canciones oficiales del evento. Este acto siempre es cuestionado, pero a mi me parece un plus complementar la noche con estas actuaciones. Además "Rise" es un temazo.
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| Skylar Grey interpretando "Rise" |
Tiempo para el combate femenino. Se rumoreaba que podría ser el mejor de todos los tiempos. El motivo, lo desconozco, pero estaba seguro de que no iba a ser así, porque a pesar del buen nivel de las 4 divas protagonistas, la situación actual de la división no da para tanto. Y aún así estuvo por encima del aprobado. Paige y AJ vencieron a The Bella Twins...y juró que si algún día llego a conocer a la inglesa, me declararé. El no ya lo tengo.
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| Paige y AJ, amor/odio |
Como siempre, se homenajeo a los inducidos al Salon de la Fama, que este año fueron: Rikishi, Larry Zbyszko, Alundra Blayze, Connor "The Crusher" Michalek, The Bushwhackers, Tatsumi Fujinami, Kevin Nash, el grandísimo Macho Man Randy Savage y en el apartado de celebridades, el casposo Arnold Schwarzenegger.
Recta final y 3 grandes combates por delante. El campeonato de USA, fue, aunque a algunos también les sorprendió, una lucha entre América y Rusia, en la que estos eran los heels. Este tipo de patriotismo lo vimos, por ejemplo, en Wrestlemania VII (1991) cuando Hulk Hogan derrotó al Sgt. Slaughter. Estaba más que sabido que los tiros iban a ir por esos derroteros, por lo tanto no entiendo tanta crítica vertida estos días. Rusev llegaba invicto, pero claro, John Cena estaba allí para algo. Alejado de las luchas principales, no era plan de sacarlo derrotado. Consiguió el título y al menos, tendrá un sitio en esta edición. Pero lo mejor de todo fue la entrada del ruso en tanque. Impagable. Como el segmento entre The Rock y la campeona femenina de UFC Ronda Rousey y Triple H y Stephanie Mc Mahon. Ronda le ajustó las tuercas a una petulante Stephanie, que se quiso llevar todo el mérito de la organización.
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| The Rock y Ronda Rousey, equipo mixto de ensueño |
Desde que Undertaker perdió el invicto en Wrestlemania la pasada edición, parecía que su combate de este año carecía de interés. Y no es menos cierto que su personaje empieza a estar muy desgastado y de que una retirada a tiempo es una victoria. Sin embargo, lo atractivo de esta lucha era, justamente, ver a una leyenda como el deadman enfrentarse a una joven promesa como Bray Wyatt. Es un contraste que nunca debe faltar en Wrestlemania. El combate vino a ser un poco lo mismo de siempre con Undretaker (resucitación, incredulidad de su rival, miradas asesinas, tombstones), y finalmente derrotó al trastornado, ampliando su marca a 22-1.
Con la puesta de sol, llegamos al main event, el campeonato mundial de la WWE entre Brock Lesnar, campeón, y Roman Reigns, ganador del Royal Rumble 2015 y aspirante. El hecho es simple. Lesnar le pega una paliza a Reigns durante toda la lucha que deja a todos los fans con la boca abierta. Ni un respiro. Solo alguna leve reacción. Pero ninguna cuenta llega a 3. Suplex, puñetazos, rodillazos...y nada, no hay cuenta. Y Lesnar, en un error de cálculo, se golpea la cara contra el poste y empieza a sangrar. Y se atonta. Pero Reigns está para pocas leches. Y pasa algo, que estaba en la mente de muchos. Es el momento. Seth Rollins decide canjear su Money in the bank. Cuando lo tiene todo ganado, Lesnar reacciona, pero se lleva por delante una lanza del moribundo Reigns que lo deja KO. Rollins aprovecha el momento para, ya con Lesnar fuera, meterle a la cabeza de Reigns el patadón contra el suelo y fulminarlo un poco más. Cuenta de 3 y Rollins coronado nuevo campeón de la WWE en el evento del año.Relativamente inesperado. Ahora, con La Autoridad de su parte, quizás estemos ante una dictadura. Y si es así, será de las de mano dura.
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| Campeón coronado |
